El equipo de F1 Red Bull publicó la pasada semana en su Web que había realizado una prueba privada al volante de un monoplaza el pasado lunes 15 de agosto con el actor Tom Cruise en el circuito de Willow Springs, California, junto al ex-piloto de Fórmula 1 David Coulthard, como instructor de la estrella del cine.
El resultado fue sorprendente, ya que Tom dio 24 vueltas al trazado (de unos 4 kilómetros) en una jornada total de siete horas, alcanzando una velocidad máxima de 291 km/h, tan sólo 6 km/h más lento que David. De hecho aprendió muy rápido, ya que Cruise llegó a mejorar en 11 segundos su tiempo inicial al terminar el día. “Me ha sorprendido cómo ha entendido todo, su rendimiento ha sido increíble teniendo en cuenta lo complicado que es pilotar un Fórmula 1. Realmente me dejó impresionado”, señalaba Coulthard.
Teniendo en cuenta que el año que viene volverá el Gran Premio de Estados Unidos en Texas, después de cuatro años; y que Tom Cruise está rodando la nueva entrega de la saga Misión Imposible, podemos decir que el marketing estuvo presente en este inesperado evento.
Sport & Marketing 